Desde que estoy pasando la recta final de mi embarazo en Brooklyn, sin duda mi día favorito de la semana es el miércoles, que es cuando le toca a Cristina ir a su clase de ballet. Normalmente la llevo yo, pero ya en estas últimas semanas (¿o días) mis salidas tienen que ser tan pocas y bien seleccionadas, que hoy su papá fue quien se encargó de llevarla para que yo al final de la semana me pueda escapar aunque sea un ratito a Fashion Week.
Sin embargo, yo la alisté para ir y le puse su hermoso tutú que compramos el sábado pasado cuando fuimos a ver la función familiar del New York City Ballet. La luz de la mañana, el tutú, Cristina y todo lo demás se alineó para que pudiera tomarle estas hermosas fotografías que comparto con ustedes.
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Since I’m nesting in Brooklyn, my favorite day is wednesdays, when Cristina goes to her ballet class. Usually, I take her, but in these very last weeks (or days?) my outings have to be few and very well selected. So, today her dad was who took her to class. This way I could save that very special moment to go, at least for a while, to Fashion Week at the end of the week.
Though, it was me who got her ready for the class, and dressed her with the gorgeous tutu that we bought during Family Saturdays at the New York City Ballet. The morning light, the tutu, Cristina and everything else aligned so I could take these beautiful pictures that now I’m sharing with you.
Reader Comments
Me encanta esta preciosa bailarina de balett, la Queen Tina!!!
[…] Me dispuse a preparar con muchísima anticipación todos los detalles del viaje a Nueva York, con el único propósito de pasar tiempo de calidad con Cristina e ir juntas a ese bellísimo Cascanueces que se había convertido en mi obsesión. Después de años de vivir soltera en esta ciudad, de repente sentí esa tremenda necesidad de ir por primera vez acompañada de mi hija, a quien le encanta el ballet. […]
[…] Me dispuse a preparar con muchísima anticipación todos los detalles del viaje a Nueva York, con el único propósito de pasar tiempo de calidad con Cristina e ir juntas a ese bellísimo Cascanueces que se había convertido en mi obsesión. Después de años de vivir soltera en esta ciudad, de repente sentí esa tremenda necesidad de ir por primera vez acompañada de mi hija, a quien le encanta el ballet. […]